sábado, marzo 05, 2011


Tanto tiempo.
No sé si no escribo porque mi teclado en Español me lo dejé en Francia o porque habitar en al casa de mis padres me paraliza.  
Algo de las dos cosas tal vez, pero no vamos a ahondar en el asunto.
Este año lo veo difícil de programar, más bien se podrá programar un esquema que se base en fluir, abrirse a los cambios imprevisibles del Universo, soltar cualquier intento de control y confiar en el proceso.

Buenos Aires me golpea. Ya hace un mes que estoy de visita parando en la casa que fue la que me vio crecer. Y no es fácil.
Camilo se adapta como pato al agua a donde sea. Estuvimos en Capilla del Monte en lo de mi hermana Agustina. Fuimos por primera ves las tres hermanas juntas. Aquelarre de día y de noche. Sin ninguna duda. 

Capilla me invita a descubrirla desde un lugar como para quedarme. Y me encanta.
Aquella casa en la que me hospedé por primera vez hace unos seis años atrás, está en venta y mi corazón late por ella como un lejano primer amor. Y entonces, me entrego a fluir, me abro a este imprevisible Universo, despido al control y confío.

Mi marido llega en tres semanas, nos extrañamos como niños. Y a Camilo no le basta esto de Skype. 

En resumidas cuentas estemos donde estemos seguimos laburando. Sobretodo nuestras relaciones. Hoy me toca la familia. Auch. Y trabajarlo desde adentro no sé si esta tan bueno, pero es lo que es. Intento salir del torbellino emocional y observar todo desde afuera. Y sanar lo que aun queda por sanar. 

Urano entra en Aries. Qué se yo, es súper importante. Se acelera el cambio. Vamos. No nos resistamos. 
Presiento buenos cambios por venir.
Enhorabuena y bendiciones para todos.
©®

Y la Tierra empezó a sacudirse. Y el temblor fue tan grande que  sacó del sueño a más de uno. Y no fue amable, más bien certera ...